Francisco Espinosa, Stephanie Larghi, Marjorie Carvajal, Sebastián Moreno, Paula Urizar, Sergio Michael, Alejandro Rebolledo, Camila Cornejos, Meliza Rojas y Ciro Barrientos, estudiantes de la Licenciatura en Artes mención Artes Plásticas de la Universidad de Chile, y Cristóbal Racordon, Consuelo Achurra, Bárbara Ardiles, Joaquín Muñoz, Francisco Navarrete, Francisca Castro, Carmen Gloria Zamora y Daniela Durand, egresados de la misma licenciatura, son parte de los 87 artistas que exhiben sus obras en el MAC Quinta Normal, en el marco del 03 Concurso Universitario Arte Joven que organizan Balmaceda Arte Joven y la Universidad Mayor para promover el arte joven, dar a conocer nuevos talentos y estimular la producción de obras.
Dirigido a estudiantes y a egresados de las carreras de Artes Visuales y Pedagogía en artes del país, este certamen de carácter bienal ha convocado a la fecha, y considerando sus dos versiones anteriores, a más de 900 artistas a nivel nacional, siendo nuevamente acogido por el Museo de Arte Contemporáneo sede Quinta Normal como parte de su línea programática que busca explorar las opciones productivas de los nuevos artistas nacionales, abriendo un espacio a la experimentación y al cuestionamiento de los límites del arte.
En su tercera versión, la comisión que evaluó a los participantes seleccionados estuvo compuesta por Ximena Zomosa, Coordinadora del área de Artes Visuales de Balmaceda Arte Joven; Varinia Brodsky, Coordinadora General del Museo de Arte Contemporáneo; y Paul Birke, Director de la Galería Die Ecke. El jurado de premiación, en tanto, estuvo conformado por Mónica Castillo, representante de La Curtiduría Oaxaca; Paulina Varas, en representación de CRAC Valparaíso; Florencia Loewenthal, del Consejo Nacional de la Cultura y las Artes; Alfonso Díaz, de la Dirección de Asuntos Culturales del Ministerio de RREE; Cristián Salineros y Mario Soro, representantes de las escuelas de artes visuales, quienes definieron a los ganadores de las categorías estudiante y egresado.
Así, de los 87 seleccionados que hasta el 26 de enero exponen sus obras en el Museo de Arte Contemporáneo sede Quinta Normal, el jurado eligió a los dos jóvenes artistas que fueron premiados con residencias artísticas en La Curtiduría de Oaxaca, en México, para el o la ganadora de la categoría egresado, y en CRAC Valparaíso, para el o la ganadora de la categoría estudiante, siendo otorgado el primero de estos premios a Fernando Balmaceda, de la Universidad ARCIS, mientras el segundo se entregó a Meliza Rojas, de la Universidad de Chile, quien además realizó una exposición individual en la Galería de Arte de Balmaceda Arte Joven sede Valparaíso.
Meliza Rojas: "Trabajo desde el habitar"
VIVIR CON HONOR O MORIR EN CANA es el nombre de la obra que Meliza Rojas exhibe actualmente en el MAC Quinta Normal, una escultura de pequeño formato que hizo a mediados de 2012, periodo en que el movimiento estudiantil había decaído respecto a lo acontecido en 2011 pero seguía estando patente. "La obra representa a los manifestantes del malestar y los sitúa en un lugar de veneración para establecer un vínculo entre la figura pública de éste y la del monumento. En las calles hay una contienda, pero el sujeto se cubre la cara, instala una discusión. La escala del monumento se ha trasladado a la del trofeo y en el pedestal de la escultura se inscribe una placa que dice vivir con honor o morir en cana, aludiendo a la frase de O'Higgins y a la Ley Antiprotesta", dice sobre su obra.
Con ese trabajo fue seleccionada para presentar un proyecto específico para postular a la residencia en CRAC, premio que obtuvo con una propuesta que "partió de una investigación contextual y cartográfica de Valparaíso, relacionada a las modificaciones del borde costero y cómo éstas han afectado y afectan al habitar de su comunidad", explica sobre su proyecto la estudiante de la Licenciatura en Artes Plásticas, quien desarrolla su trabajo en diferentes soportes y medios pero siempre "desde el habitar, entendido como la experiencia cotidiana del ser humano en un territorio, reflexionando cómo este habitar está sometido a un contexto, a su construcción histórica, política, económica y ambiental. La mayoría del tiempo desde una investigación previa, hacia la escultura, instalación, intervención, audiovisual y acción". añade.
Desde esa perspectiva, ¿qué es lo que más destacas tanto de la residencia como de la exposición que realizaste?
La residencia y el trabajo con CRAC significaron una experiencia importante en mi trabajo, ya que por un lado puso en crisis la academia y por otro conocí otras formas de desarrollar el quehacer artístico, enfocado en la comunidad y sus problemas locales. La experiencia transdisciplinar fue muy rica.
El proyecto desembocó en AGUA BAJO TIERRA, trabajo compuesto por un mapa/políptico y una intervención en el espacio público. Ambos configuran un monumento efímero a la historia subyugada, a las luchas sociales invisibilizadas en espacios que nacen en el territorio ganado al mar, en un contexto de prontas modificaciones en el borde costero -a pesar de la postura de su comunidad- y en que se conmemoraban 10 años de Valparaíso como Patrimonio de la Humanidad y 40 del golpe militar.
La performance o intervención es algo que destaco de este proceso, ya que fue en la realidad, es decir, en un complejo sistema de relaciones y controles que estaban fuera de mi control, entendiendo la ciudad como un campo de fuerzas y flujos. La acción la absorbió y completó el cotidiano, la gente que transitaba por ahí se integró al rito, ya sea desde su sola presencia, sorpresa, o intervención. De hecho, en esta especie de vía crucis, un joven -Pablo- me obligó a explicarle qué estaba pasando, qué hacía, y me ayudó a cargar la boya por el último tercio del recorrido, integrándose al rito: tocó la campana en una de las estaciones, en el Liceo de Niñas N°2, lugar que había sido un centro de detención de presos políticos, sólo de hombres.
