Con el objetivo de descubrir y potenciar nuevos talentos artísticos, y destacar especialmente el potencial creativo regional, el Premio MAVI UC en su decimosexta versión, escogió 46 obras finalistas que forman parte de la exposición colectiva XVI Premio MAVI UC LarrainVial Arte Joven 2023, que desde el 7 de junio al 10 de septiembre se aloja en las salas 3 y 6 del museo, entre el 07 de junio y el 10 de septiembre de 2023.
En dicha exposición, el pasado 6 de julio se llevó a cabo la distinción en las categorías Premio MAVI UC Arte Joven, Premio LarrainVial de Adquisición, Premio del Público Antenna y 2 Menciones Honrosas. De este modo la artista visual Licenciada en Artes con mención en Artes Plásticas de la Universidad de Chile, Macarena Cuevas, resultó ganadora del Premio MAVI UC Arte Joven por su obra “El ojo se acostumbra a las desapariciones”, que le permitirá realizar una exposición individual durante 2024 en el Museo de Artes Visuales MAVI UC.
“La obra es un acrílico que originalmente pertenecía a la estructura de un paradero en Santiago, el cual se deformó producto del fuego (posterior a una manifestación). La idea general era la de sustraer. Sacar este objeto del lugar donde lo encontré y luego en otro gesto de sustracción, borrar los signos de su procedencia. El material usado para esto fue una pintura negra que absorbe mucha luz, y que a su vez muestra la forma como si fuese un recorte. Hay una exageración del contorno del volumen, generando algo así como un ‘vacío’ o ‘agujero’ en el espacio”, explicó la artista ganadora.
Macarena Cuevas contó que le interesa la ambigüedad material, “que también nos hace pensar de qué está hecho este objeto, qué peso tiene, será pesado o liviano, cuál es su procedencia, etc.”, señaló. Además contó que el título, es un verso del poema Octubre de Louise Gluk, que para ella tiene que ver con la influencia de la percepción y la memoria en cómo percibimos el mundo.
“Por ejemplo, cuando uno entra a un cuarto oscuro, al principio no ve nada, sin embargo, pasado un rato el ojo comienza acostumbrarse a la falta de luz, y empieza a ver y reconocer formas que inicialmente no había percibido. En ese sentido, el proceso de pintar el acrílico encontrado fue produciendo algo similar en mí, siendo cada vez más sensible a la oscuridad del pigmento, teniendo que agregar cada vez más capas de pintura. Además, creo que ese fenómeno en la percepción, también habla de cómo podemos habituarnos a cosas que tienen que ver con la pérdida, el olvido de personas u objetos”, puntualizó la egresada.
El Premio LarrainVial de Adquisición recayó en la Licenciada en Artes con mención en Artes Plásticas, Renata Ayala, con la obra “La nube que sopló el Dragón”, consistente en un paisaje realizado en relieve sobre palmetas de porcelana esmaltada.
“Esta es la primera vez que postulo al concurso del MAVI. No quise hacerlo antes porque creía que mis obras no iban bien con el espacio, además de considerar que no tenían gran oportunidad de obtener un premio. Esta vez me preparé con antelación y ejecuté una obra que tenía en mente hace tiempo. Creía que, por la materialidad, la técnica y las dimensiones, era perfecta para el espacio del museo”, detalló la artista.
La materialidad de la porcelana en “La nube que sopló el Dragón” es el punto de partida en términos visuales y conceptuales. “Utilizo la porcelana en gran parte de mi trabajo, y para esta propuesta quise ahondar un poco en la historia de este material. Tomando como punto de partida el imaginario de las vasijas de porcelana china azul y blanca, y en específico la imagen del Dragón, pensé en la influencia que este tuvo a nivel mundial, ya que se trató de imitar en diferentes países, incluso en Chile. Pensé en la distancia geográfica y temporal que existe entre cada una de las versiones de esta visualidad y cómo fue posible que yo accediera a ellas”.
Considerando lo anterior, el paisaje plasmado en la obra es un collage de motivos de loza azul y blanca de algunos de los países que trabajaron con esa visualidad, entre los que se encuentran el Dragón y algo del Willow de Lozapenco, el Blue Willow inglés y elementos de la cerámica de Delf.
“Realizar esta obra me tomó en total 5 meses. Partí con un boceto en papel para ubicar los elementos del paisaje. Luego realicé un dibujo digital y procedí a parcelar la imagen. Cada parte la transformó en un archivo tridimensional que imprimí en 3D. Después estampé esto sobre placas de porcelana que preparo desde cero, para luego pasar a la primera quema de bizcocho. Posteriormente, esmalté y lo llevé a la quema de alta temperatura. Una vez listas las piezas, procedí a trabajar el montaje. Debido al peso y tamaño de la obra, tuve la ayuda de mis amigos Joaquín Hidalgo e Ignacio Ruano, quienes saben trabajar la madera y solucionar montajes complejos”, especificó Ayala.
La egresada del DAV aseveró que “Ganar este premio es algo que quería mucho, me preparé y lo tuve en mente desde el inicio. Esto me llena de energía para continuar, porque a veces una necesita esa validación y reconocimiento, a pesar de tener seguridad de que es un buen trabajo. Me pone contenta también que la obra no regrese al taller y que se vaya a un nuevo espacio”.
El Premio del Público Antenna, lo obtuvo el Licenciado en Artes con mención en Sonido y Magíster en Artes Mediales de la Facultad de Artes de la Universidad de Chile, Matías Serrano, gracias a su obra “La memoria contándole a la luz el sonido de la lluvia”, una obra sonora que el artista inició en un curso del Magíster de Artes Mediales con el académico del DAV, Pablo Rivera en el 2021.
“Como artista sonoro he trabajado en diversos formatos, como performances, conciertos, intervenciones efímeras o archivos audiovisuales, pero no he tenido muchas oportunidades para mostrar trabajos que se expongan en contextos expositivos más clásicos, por lo que pareció una buena oportunidad para mostrar al público esta obra sonora que tenía bastante avanzada gracias al magíster”, contó el artista
La obra consiste en un ensamblaje de varios dispositivos técnicos: una ampolleta incandescente, dos discos duros de computador, cable de cobre y un reproductor de audio. “Los discos fueron modificados para hacerlos funcionar, ya no como dispositivo de almacenamiento, sino que como parlantes, logrando así que emitan sonido. Claro que no de una manera fiel, sino en bastante baja calidad. A este nuevo ‘parlante’, le hice reproducir un archivo de audio de una de las últimas lluvias del 2021, que grabé desde la puerta de mi casa esa temporada”, explicó Serrano.
Con este trabajo el egresado busca rescatar la lluvia en la ciudad de Santiago, donde se ha vuelto un fenómeno cada vez más escaso, como consecuencia de la crisis climática, “por lo que la obra es un intento de guardar algo de esa lluvia para después, asumiendo que es una experiencia sensorial mucho más compleja que solo lo sonoro”.
En “La memoria contándole a la luz el sonido de la lluvia” Serrano utiliza una ampolleta incandescente (objeto técnico ya en retirada, reemplazadas por las ampolletas leds), ya que para él se encontrarían en la misma línea de tiempo de la tecnología, siendo la ampolleta una de los hitos fundamentales de la historia de la electricidad y que ya se encuentra obsoleta.
“Lo mismo que el disco duro, que está siendo actualmente reemplazado por nuevas tecnologías de almacenamiento. Desde una perspectiva un poco catastrófica, esta línea de tiempo en el futuro podrá incluir el momento en el que la crisis climática haya afectado a la lluvia en Santiago de tal forma en que sea una experiencia a la que podamos recurrir sólo por medio de (torpes) aparatos de reproducción”, afirmó.
Al ser consultado por la significancia que tiene este reconocimiento para su carrera artística, Matías Serrano contó que, “obtener el premio del público, que fue decidido por los mismos visitantes durante el primer mes de exposición, fue bastante inesperado. Principalmente porque siempre sentí que la obra era un poco un ‘bicho raro’ dentro de la muestra, ya que habían muy pocos trabajos mediales o sonoros. Tenía la sensación de que solo las personas más cercanas a este nicho medial se interesarían, pero me equivoqué”.
Y agregó: “Me alegró mucho saber que tantas personas resonaron con una obra cuyo primer material era el sonido, y luego dispositivos eléctricos. También me intriga saber qué fue lo que les llevó a dejar su voto a una obra sonora en un contexto visual. Finalmente, una cierta sensación de validación del trabajo que he estado desarrollando (en solitario y con la Colectiva 22bits), ya que no estudié artes visuales y he tenido que recurrir a otras estrategias para comprender y adoptar el lenguaje artístico, proceso en el que me ha ayudado mucho el magíster y trabajar como montajista y productor técnico para otr@s artistas e instituciones”.
Entre los expositores destacados del DAV también están:
Sebastián Galdames, Licenciado en Artes con mención en Artes Plásticas, por su pintura “Fisura”
Ignacia Heredia, Licenciada en Artes con mención en Artes Plásticas con “Herencia II” (cerámica y video).
Fernanda Fuenzalida, estudiante de Licenciatura en Artes con mención en Artes Visuales, gracias a la obra "Cartas a las personas que me vieron desnuda" (cerámica y fotografía)
Cabe destacar que el Premio MAVI UC LarrainVial Arte Joven, en su decimosexta versión, cuenta con el financiamiento de LarrainVial y la colaboración de Fundación Antenna. Además, en esta versión del certamen el jurado está compuesto por:
Teresa Riccardi, Directora Museo Sívori, Buenos Aires (Argentina).
Nicolás Gómez Echeverri, Ex Director Ejecutivo del Museo de Arte Contemporáneo – MAC Lima (Perú).
Leonardo Portus, Artista Visual Autodidacta (Chile).
