Desde el 2008 un grupo de académicos del Departamento de Artes Visuales investiga y estimula la creación en el campo de la relación entre artes visuales y sonido; sonoridad y escucha, como elementos artísticos. Ese mismo año organizaron un seminario, con exposiciones y ciclo de performances sonoras, llamado "Oscilación: pensar el / trabajar con / sonidos en espacios intermedios".
Desde entonces -y aunque no constituído oficialmente como núcleo- este grupo de artistas continúo realizando diferentes actividades académicas en torno a las artes sonoras, como los talleres complementarios en pregrado, así como la realización por ocho años del Diploma de Postítulo en Arte Sonoro a nivel de postgrado y el Diploma de Extensión en Arte y Exploración Sonora.
Desde ahí que los académicos/as del DAV, Mónica Bate, Francisco Sanfuentes, Rainer Krause, Jorge Cabieses-Valdés, además del egresado y ayudante del DAV, Lucas Soffia, junto al egresado del Departamento de Sonido, ahora docente de la Facultad de Artes, Matías Serrano, decidieron consolidar el trabajo realizado por años a través de la formación oficial del Núcleo Artes Sonoras.
Un núcleo que entiende el sonido como un material, un lenguaje y un medio de creación artística con posibilidades diferentes que en la música, sin excluir la conexión con aquella. Y aunque en primera instancia se centraron en el concepto “sonoro” para referirse a sus prácticas, con el tiempo y la experiencia del trabajo con sonido, optaron por abordar y englobar estos temas desde el concepto Artes Sonoras.
“El término ‘arte sonoro’ surgió a finales de los años 60 como traducción del vocablo inglés ‘sound art’. En ese tiempo englobó los trabajos de artistas visuales que utilizaron sonido en sus trabajos, sin necesariamente referirse a la música. Hoy este término parece muy restringido en relación a las prácticas artísticas contemporáneas, donde el sonido no-musical está presente no solamente en las artes visuales, sino también en las artes escénicas, mediales, literarias e incluso musicales. El plural ‘artes sonoras’, en el nombre del Núcleo, apunta a esta diversidad transdisciplinar actual”, explicó Rainer Krause.
El académico y actual director del DAV, Francisco Sanfuentes, aclara que “lo sonoro refiere principalmente a prácticas de corte experimental donde el sonido es su material privilegiado, desplegándose en ámbitos objetuales, instalativos, performáticos etc. Se ha creado una escena específica en torno a lo sonoro que a veces puede llegar a ser excluyente de prácticas que aún en su experimentalidad colindan con lo musical, (además lo autodefinido como musical también tiende a cerrarse sobre sí mismo). Entonces ampliar el concepto a artes sonoras abre el campo a la convivencia y cruce en un mismo ámbito tanto a prácticas sonoras experimentales como musicales. Creo que eso enriquece el diálogo, cruces y tensiones entre ambos territorios y evita separaciones a veces bastante arbitrarias”.
En base a eso, el Núcleo Artes Sonoras entiende el sonido como un material, un lenguaje y un medio de creación artística con posibilidades diferentes que en la música, sin excluir la conexión con aquella. Así lo manifestó el profesor Jorge Cabieses-Valdes, quien aseveró que “las artes sonoras se han consolidado como un campo de experimentación, investigación y producción artística de gran importancia en nuestro país. Me atrevería a decir incluso que debe ser uno de los medios donde su descentralización acontece de manera más exitosa”.
Por eso, este núcleo se proyecta como un espacio de discusión, experimentación y difusión de ideas relativas al sonido. Como lo realizado a principios del 2023 en Atenas, Grecia, donde encabezaron el evento conocido como BULLA.
Además este núcleo se proyecta como un espacio para aglutinar, articular, reflexionar y proyectar en el medio, toda producción sonora, entendida en su acepción más amplia, que se ha producido y se produce al interior del departamento y espacios afines.
“Un núcleo, en primer lugar, aglutina distintas perspectivas respecto de un mismo asunto, problema o práctica, eso ya es relevante para el desarrollo de procesos reflexivos y de creación- investigación. También abre campos de diálogo y experimentación, al tiempo que busca formas de difusión de esa actividad interna. Por otra parte, promueve y acoge distintas prácticas de lo sonoro que se estén desarrollando tanto al interior de nuestro departamento como en la escena local en general”, indicó Francisco Sanfuentes.
Por este motivo, el Núcleo Artes Sonoras promueve la asociatividad de proyectos y posibilita generar formalmente, una serie de acciones como presentación de obras, coloquios y conferencias, que buscan enriquecer las prácticas artísticas de la Facultad de Artes. “Un núcleo es un lugar de creación y conocimiento en la medida que aúne distintos procesos productivos y reflexivos y los proyecte articuladamente en el medio artístico. Esa es la apuesta de este núcleo: abrir un territorio, abrir un campo”, declaró Sanfuentes.
Conciertos y Bandcamp
Tanto el Núcleo Artes Sonoras en general, como cada uno de sus miembros de forma personal, han usado la plataforma Bandcamp para alojar sus obras sonoras. Una página web que se autodefine como una tienda de discos y una comunidad musical en línea, donde fans apasionados descubren artistas que adoran, se conectan con ellos y los apoyan directamente.
De allí que el lanzamiento oficial del Núcleo Artes Sonoras, implique la difusión del material que produce el núcleo a través de dicha plataforma, como el lanzamiento del primer disco del sello, consistente en un compilado de obras fonográficas, con registros de instalaciones, grabaciones de paisajes sonoros y performances de los participantes.
“El Bandcamp se visita y escucha casi del mismo modo que uno adquiere, atesora y escucha concentradamente un disco. Quizás no tiene la misma popularidad de otras plataformas, pero promueven una escucha más dedicada y concentrada, y de mejor calidad de un trabajo sonoro y/o musical”, señaló Francisco Sanfuentes.
Similar opinión expresó Jorge Cabieses-Valdes quien indicó que “Bandcamp se ha consolidado en los últimos años como una de las principales plataformas de difusión de música y proyectos sonoros en general. Nos interesa su alto grado de visibilidad y accesibilidad, por lo que esperamos que nuestros futuros contenidos sean difundidos y escuchados ampliamente”.
El lanzamiento también conlleva la realización de dos conciertos, durante los viernes 30 de junio y el viernes 7 de julio, en el Auditorio Las Encinas de 12:00h a 13:30h. Una actividad que da inicio formal al Núcleo Artes Sonoras del DAV, en la que los seis miembros realizarán presentaciones sonoras en las dos jornadas y en diversos formatos, en el contexto del lanzamiento del sello y las actividades oficiales del Núcleo.
En la jornada del viernes 30 de junio se presentan: Jorge Cabieses-Valdes con la performance El Ventrílocuo; Mónica Bate exhibe el video On Growth and Form; Rainer Krause presenta el video La isla [observación] y Francisco Sanfuentes encabeza una presentación en vivo Lo que no se ve, lo que no se escucha.
Para el día viernes 7 de julio se programaron las presentaciones de Matías Serrano con un concierto de paisajes sonoros titulado Viento subantártico; Lucas Soffia con la interpretación en vivo de ·Turntablism·, Rainer Krause con su obra acusmática opus 1/23 para coro mixto y Mónica Bate con la instalación TLC [C][O][R][O].