El 24 de octubre se inauguró la exposición Confecciones, en la que los artistas visuales Adolfo Martínez y Antonia Daiber -ambos Magister en Artes Visuales tambén por la Casa de Bello- exhiben pinturas, collages y objetos, a través de los cuales cuestionan la industrialización por sobre la confección manual, poniendo en valor el acto de confeccionar, utilizando esta vía para construir y mostrar sus propuestas plásticas.
“Forzar los materiales, no medir, no recortar, rasgar con los dedos, doblar a pulso un trozo de hojalata para construir un traje inutilizable, son actos cuya lógica es absurda. Sin embargo, es la lógica que ambos artistas utilizan, ya que permite un comportamiento incierto e inesperado de los materiales. El resultado puede ser un desastre, pero en ese intersticio se cuela el azar y ocurre el calce de las partes: la confección se arma en el ojo del espectador [...]Forzar los materiales en busca del traje a la medida es un acto de fe”, explica el texto de la exposición.
De este modo, el académico del Departamento de Artes Visuales de la Facultad de Artes de la Universidad de Chile, Adolfo Martínez, exhibe un pantalón, una carretilla en miniatura y una chaqueta, todos hechos de hojalata. Junto a estas piezas, se encuentran unos zapatos con una soga, además de unos vaciados en bronce de cajas de cartón.
“La caja de cartón presenta su destino desechable bajo el pesado y duradero bronce, que conserva su forma pero muta en su materialidad como una alquimia del objeto cotidiano. Los zapatos por un lado, la chaqueta y el pantalón por otro, remiten a un cuerpo, a una vida pasada. Una presencia secreta revelada en la apariencia de las cosas”, versa el texto.
Papeles rasgados, planos opacos de témpera, trozos de lino y cajas de cartón constituyen interiores, sobremesas, desnudos y paisajes son las obras exhibidas por la artista visual egresada del DAV, Antonia Daiber. Estos collages hechos en tela sobre bastidor se caracterizan por una fuerte carga material: relieve, textura y gestualidad. Confeccionados a partir de imágenes mentales, estos cuadros evocan escenas de la vida cotidiana, el recuerdo de una luz rasante entrando por la ventana y rebotando sobre las cosas que casualmente quedaron ahí.
Es así como Confecciones no pretende ser novedosa ni menos original, sino que a través del empleo de viejos lenguajes del siglo pasado buscan mostrar la diferencia con las tecnologías contemporáneas.
“La pantalla digital, lisa, brillante, homogénea y epiléptica se opone al cuadro opaco, rugoso, heterogéneo, quieto y callado. En ese choque de lenguajes Confecciones es una pequeña resistencia, desde la provincia del mundo, frente al animal tecnológico”, explican los expositores.
La invitación es para visitar la exposición Confecciones en TIM Arte Contemporáneo -un espacio dirigido por artistas, emplazado en el casco histórico de barrio Yungay en Santiago de Chile- ubicado en calle Rafael Sotomayor 232, Santiago, hasta el 20 de noviembre. Coordinar visitas a intuitivemachineart@gmail.com o al wsp +56 974392108.
