El próximo 23 de julio se cumplirá un año de la muerte del destacado compositor y maestro Cirilo Vila. Su deceso enlutó la comunidad artística nacional, sobre todo al interior del Departamento de Música y Sonología, donde el maestro se dedicó a formar a numerosas generaciones de músicos.
Su influencia, modos de entender la creación artística y la labor de la Universidad de Chile en el país calaron a varias generaciones y es por ello que el primer aniversario de su partida se conmemorará con música. El miércoles 20 de julio en la Sala Isidora Zegers el conjunto Compañía de Música Contemporánea, dirigido por Carlos Valenzuela, presentará el concierto El corazón piensa. Homenaje al maestro Cirilo Vila.
Discípulo del compositor, Carlos Valenzuela destaca el lado social y pedagógico con el que el maestro Vila desarrollaba su quehacer. “Cirilo tenía una visión bien romántica de la música y esa idea estaba presente en las obras que hacía, en las que pensaba siempre en la gente no academizada. Cirilo Vila pertenece a la tradición vinculada al concepto de hacer Universidad, de transmisión de conocimiento, de pensar en la música para todo tipo de gente”, dice.
De hecho, rememora una frase que reiteraba siempre el compositor a sus colegas y estudiantes. “Hay que implementar toda una política educacional artística que requiere de un cierto tiempo para que vaya dando sus frutos reales. Mientras tanto, hay que buscar conciliar aquello que pueda ser más atractivo para el público con cosas que son más nuevas”.
En el concierto se buscará traer el presente nuevamente la obra de Cirilo Vila, ya que “siempre se toca lo mismo y su música no es de fácil acceso”, dice Valenzuela. “Como dijo poéticamente Rodrigo Torres- académico del Departamento de Música y Sonología- Cirilo se nos está evaporando, está desapareciendo. Por eso hay que echar a correr su música”, añade Valenzuela.
Del repertorio a ejecutarse, Carlos Valenzuela destaca el noneto Canto, estrenado en 1968 en el Teatro de la Música de París, dirigido por Cirilo Vila, en el marco de los Grandes Conciertos de La Sorbonne organizados por Max Deutsch. También Secuencia. Momentos para cuarteto de cuerdas, una pieza que no se interpreta habitualmente.
El lado humano del maestro
La idea de este concierto homenaje surgió hace varios meses, luego de que Carlos Valenzuela recibiera la invitación del profesor Gabriel Matthey, académico de la Escuela de Postgrado de la Facultad de Artes de la Universidad de Chile, para participar de la revisión y clasificación de los materiales de la biblioteca personal de Cirilo Vila. También fue parte del proceso la pianista y musicóloga Fernanda Ortega.
Luego de la muerte del maestro Vila, la Biblioteca Nacional compró los materiales de la biblioteca personal del compositor y los profesores tuvieron la posibilidad de conocer y clasificar dichos insumos.
“Organizamos el material en distintos temas: Manuscritos con sus obras y cuadernos personales, materiales de clases para la Universidad de Chile, fotografías personales, programas de conciertos, libros de literatura universal y libros de música, discos, partituras de compositores nacionales y extranjeros, documentos familiares”, cuenta Fernanda Ortega. “Asimismo algunos materiales de sus clases incluyen apuntes y calificaciones de sus alumnos. Esto lo señalo porque gran parte de la obra de Cirilo Vila fue su labor como maestro de varias generaciones de compositores chilenos hoy en plena actividad”, dice.
“Lo que más hay son manuscritos inconclusos, esbozos, borradores de obras no terminadas, por ejemplo varias piezas para Quilapayún”, narra Valenzuela. “También están los apuntes de las clases de análisis que Cirilo tuvo con Olivier Messiaen y las de composición con Max Deutsch”, cuenta.
Conocer estos materiales también les permitió acceder a documentos que dan cuenta del lado más íntimo y lúdico del maestro Vila. “Encontramos una pieza para chelo y piano que no se incluyó en el concierto porque considero que está inconclusa y él anota la fecha y lugar del concierto, pero en una parte escribe que desde ese momento hacia adelante el pianista improvisó y anota abajo ¡oh, qué escándalo! Entonces es chistoso que él ponga esas citas mentales”, cuenta Valenzuela.
“Luego de la revisión su biblioteca, creo que lo que más se rescata es el lado humano de Cirilo, un área que él era bien reacio a compartir ya que era bien introvertido. Ese lado divertido es interesante porque él siempre fue una persona de la talla intelectual, entonces cuando sale con cara de loco en la foto con su hijo en brazos, se conoce otro aspecto de su personalidad”, explica Valenzuela.
“El trabajo que realizamos en una primera etapa fue de organización, separación y división del material. No tuvimos la oportunidad aún de estudiar el material de modo detallado. Por ejemplo identificar las partituras, sus libros, o estudiar sus cuadernos de apuntes personales. Esto deberá ser abordado en una próxima etapa. Especialmente respecto a sus manuscritos”, dice Fernanda Ortega.
“Personalmente me interesa poner a disposición el material musical de Cirilo que hay. Quiero que mi aporte sea ayudar a que su obra se difunda”, manifiesta Carlos Valenzuela
El concierto El corazón piensa. Homenaje al maestro Cirilo Vila se realizará el miércoles 20 de julio a las 19:30 horas en la sala Isidora Zegers. La entrada es liberada. El ensamble Compañía de Música Contemporánea es un cuerpo estable del Departamento de Música y Sonología, que este año cumple 10 años de trayectoria.
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