Siete cajas de madera aglomerada que operan como contenedores de obras conforman la propuesta con la que Francisca Gallardo está optando al título de grabadora, una instalación en la que, de cada una de esas cajas, se desprenderán cables con un interruptor que permitirá iluminar su interior y con ello las obras que allí se encuentran. "No existe ninguna invitación formal para usar los interruptores, pero tampoco una restricción. Por lo tanto, queda a juicio del espectador el dar inicio al segundo acto de la obra, que es una invitación a la curiosidad", explica esta egresada de la Licenciatura en Artes Plásticas de la Universidad de Chile que, a partir de este lunes 9 de enero, exhibirá Bello Voyerista en la Sala Juan Egenau, en el marco del ciclo de exposiciones Tesis 11.
Y es que la posibilidad de existencia de esta propuesta se sustenta justamente en el interés que pueda despertar en quienes visiten la muestra, dejándose ver sólo si éstos están dispuestos a esperarla. "El espectador de mi obra, como el de muchas más, acepta la invitación del artista para ser parte de ella, aceptación que conlleva hacerse cargo de las fantasías y construcciones de mundos imaginarios", señala Francisca Gallardo sobre las escenas que se encuentran al interior de esas cajas, las que podrán apreciarse por medio del orificio que cada una de éstas tiene y que funciona como una especie de pequeña ventanilla que se plantea "como una oportunidad en la que la decisión de aceptarla recae en el espectador. Entonces, la obra espera suspendida la aceptación", agrega la artista.
Por ello es que la curiosidad y el interés son fundamentales en esta propuesta, sobre todo al considerar que las cajas están hechas con madera aglomerada, material que "hace que la obra se presente en forma aséptica al espectador, generando una distancia debido a la frialdad del exterior de la obra y sin presentar signos de manualidad ni de alguna intervención", dice Francisca Gallardo sobre esta propuesta en la que queda en evidencia el uso que habitualmente se le da a estas cajas, decisión que tomó pensando en la posibilidad de encontrarse con un público partícipe y pensador, capaz de decidir la existencia de esta obra que se "genera y construye de forma continua a partir de la pura observación", concluye esta egresada de la Licenciatura en Artes Plásticas.
Junto a Bello Voyerista se exhibirá Organismo, propuesta con la que Rodrigo Arteaga también está optando al título de grabador y que se traducirá en una instalación construida con dibujos, grabados, collages, marcos y objetos que serán desplegados sobre un muro; una segunda instalación realizada a partir de una agenda intervenida del año 2011; y una vitrina o "gabinete de curiosidades" con objetos, esculturas, libros y dibujos. Y es que, lo que le interesa es "que cada obra o fragmento tenga valor por sí mismo, pero que todas juntas se potencien creando nuevas lecturas y relaciones", dice este joven artista que, desde hace algún tiempo, ha estado trabajando bajo la lógica del organismo o mecanismo, en la que cada dibujo, objeto, libro o fragmento conforman un todo, y donde la suma de sus partes, además, arman algo nuevo.
"De la misma manera que, por ejemplo, los órganos conforman el cuerpo o las células los órganos", explica al respeto este egresado de la Licenciatura en Artes Plásticas, quien comenzó a desarrollar este tipo de operaciones motivado por su inquietud en torno a "las relaciones poéticas y los cruces entre distintas ciencias, artes o áreas de pensamiento, como la geografía, la anatomía o la botánica", señala el artista, agregando que lo que finalmente le interesa de trabajar bajo esta lógica de organismo son "las relaciones que pueden armarse, por ejemplo, por un dibujo de una máquina que está al lado de un estómago, y éste al lado de un mapa porque, lo que a partir de ello se produzca, podría potenciar o entorpecer la apreciación de cada obra, que pasaría a conformar otra cosa", dice.
A ello responde tanto la cantidad de elementos que Rodrigo Arteaga integra en sus propuestas como la naturaleza de éstos, una forma de trabajar que este artista vincula a las teorías sobre el microcosmos y el macrocosmos, y donde las diversas unidades utilizadas son yuxtapuestas y desplegadas en lugares determinados, cuestión que "se corresponde con la manera en la que se despliega un 'gabinete de curiosidades'", añade este artista que exhibirá Organismo en el marco del ciclo de exposiciones Tesis 11 que este lunes 9 de enero, a las 18:30 horas, inaugura esta nueva muestra en la Sala Juan Egenau, la que se podrá visitar hasta el 13 de enero, de lunes a viernes, de 10:00 a 21:00 horas, en este espacio ubicado en Las Encinas 3370, Ñuñoa, al interior del Campus Juan Gómez Millas. La entrada es liberada.
