Los violinistas Rodolfo Mellado y Ricardo González junto al interprete en viola Pablo Salinas y Roberto Becerra con su violonchelo se toman más que en serio su labor como cuarteto de cuerdas y se confiesan completamente comprometidos con la música universal. De ahí el carácter y la fuerza de su nombre: CuartEthos. “Escogimos ese juego de palabras, porque el ethos musical es lo que nos une a todos nosotros”, asegura Rodolfo Mellado, y agrega: “la música en esencia es una sola. No nos cerramos a ningún estilo ni época, lo que queremos es tocar con sentido todo tipo de música pero con la mirada puesta en el contexto actual”.
Luego de presentarse en diversos lugares, como el Palacio Concha de Santiago Centro, este miércoles 26 de mayo CuartEthos llega a la Sala Isidora Zegers. El concierto se iniciará a las 19:30 horas con la presentación del Cuarteto #3 del ruso Dimitri Shostakovich, obra creada en 1946 y marcada por las consecuencias de la Segunda Guerra Mundial. Luego vendrá el Cuarteto en Do Mayor op 59 #3 del clásico alemán Ludwig van Beethoven, compuesto en 1806 e influenciado por melodías rusas.
Si bien al interior del conjunto de cuerdas explican que con la elección de las obras de Shostakovich y de Beethoven buscan generar un contraste entre las dos estéticas, aseguran que existen varios puntos de encuentro entre ambos autores. “La búsqueda en ambas obras es la misma”, afirma Rodolfo Mellado sobre el repertorio que interpretará con sus compañeros el próximo miércoles 26 de mayo. Y para graficarlo explica que en ambos casos existe un constante juego entre elementos opuestos, una lucha de fuerzas que se hace patente en cada movimiento de las obras.
“Ambos cuartetos además son referentes fundamentales para los compositores y tal como en otros compositores los cuartetos son una especie de laboratorio para la posterior creación de piezas sinfónicas”, agrega Mellado para quien tanto Shostakovich como Beethoven “son dos grandes revolucionarios”. Mientras el Cuarteto #3 del ruso “cuenta con una sonata con fuga, en una línea muy clásica, está actualizado armónicamente a las necesidades emocionales que Shostakovich tenía en ese momento, las que estaban muy relacionadas con los efectos de la Segunda Guerra Mundial en su país. En tanto Beethoven siempre es un referente contemporáneo”, sentencia Rodolfo Mellado.