Reconocido como uno de los iniciadores del Nacionalismos Musical Mexicano -movimiento artístico cultural que abarcó la primera mitad del siglo XX, y que es fundamental dentro de la búsqueda de una personalidad original para la música y el arte mexicanos y latinoamericanos en general-, Manuel María Ponce (1882 - 1948) se destacó por ser un autor que recogía elementos culturales de la música popular de su país y los mezclaba los elementos formales de la tradición musical europea. Creador inquieto e ilustrado, se preocupó de plasmar ese sentir en sus cuatro sonatas para guitarra, las que compuso entre los años 1923 y 1930.
El próximo miércoles 26 de agosto, a partir de las 19:30 horas, el público de la Sala Isidora Zegers (Compañía 1264, Santiago Centro) podrá disfrutar del ciclo completo de las Sonatas para Guitarra de Manuel Ponce, de la mano del destacado guitarrista Luís Orlandini.
Si bien las obras Sonata Mexicana (1923), Sonata III (1927), Sonata Romántica (1928) y Sonata Clásica (1930) ya han sido presentadas en Chile, según Orlandini esta sería la primera vez que se realice el ciclo completo. "El ciclo de cuatro Sonatas de Manuel María Ponce para guitarra constituye un ciclo de gran valor artístico y sintetiza una parte importante del espectro compositivo del ilustre compositor mexicano", declara el guitarrista.
Sobre la importancia del repertorio compuesto por Ponce, Luís Orlandini asegura: "No hay en la literatura para guitarra solista otro ciclo que tenga la solidez de este grupo de obras. A pesar de que Ponce no haya sido guitarrista, con la colaboración del español Andrés Segovia logró plasmar obras en que la guitarra es un gran vehículo de expresión musical".
De forma más detallada Orlandini hace una pequeña distinción entre cada una de las sontas. "Muestran una escritura 'en estilo' al homenajear al español Fernando Sor en su Sonata Clásica y al austriaco Franz Schubert en su Sonata Romántica", declara y agrega: "Es quizás en las otras dos donde el compositor hace gala de su personal estilo y uso de la armonía. Mientras en la Sonata Mexicana, la primera obra que escribió para este instrumento, hace uso de temas del folklore mexicano, en Sonata III es donde logra plasmar con mayor profundidad sus auténticas ideas musicales".