El próximo miércoles 10 de junio, a las 19:30, en la Sala Isidora Zegers se llevará a cabo un Homenaje a la figura y obra de Felix Mendelssohn, compositor y pianista alemán del cual se conmemoran 200 años de su nacimiento. Genio musical del siglo XIX que marcó con sus creaciones todo el romanticismo, inició su carrera siendo aún niño, impactando inmediatamente a la sociedad de su tiempo: fue catalogado como un nuevo Mozart y admirado por personajes de la talla de Goethe, célebre dramaturgo alemán autor del Fausto, además de filósofo, artista y científico.
Para el concierto de Homenaje, el violinista Elías Allendes anuncia la presentación de una Selección de Lieder (formato de obras de canto acuñado por músicos alemanes y que se popularizó durante el Romanticismo) y el Trío en re menor para piano, violín y violonchelo, Opus 49. En la interpretación, junto a Elías Allendes estarán el pianista Alfredo Saavedra, el violonchelista rumano Mircea-Mihai Ticu y la contralto Carmen Luisa Letelier.
- ¿Por qué es imprescindible homenajear la figura de Felix Mendelssohn?
- Primero que todo, el tipo es interesantísimo, al punto de que fue admirado por Goethe desde muy pequeño, y Robert Schuman, músico de su tiempo, lo calificó como el Mozart del siglo XIX. Mendelssohn fue un nuño precoz, desde muy pequeño demostró su talento y desarrolló una exitosa carrera musical. Un talento que no es gratuito, ya que es de los pocos músicos que vienen de familias acomodadas y con una gran tradición cultural lo que ya lo hace un músico especial.
- ¿Cómo incidió en él ese contexto de familia acomodada?
- Nieto del gran filósofo judío-alemán Moisés Mendelshon e hijo de uno de los poderosos banqueros de la Alemania de su tiempo, Mendelssohn no fue cómo el típico músico arrabalero: como un Mozart, cuyo padre era músico de corte y tuvo que esforzarse mucho para que su hijo llegara a ser el gran músico que fue; un Beethoven, hijo de un padre borracho que le pegaba para que tocara y tuviera que alimentarse; o Brahms, que tocaba en burdeles cuando niño. Mendelssohn ya a los 12 años pudo tener una orquesta de cámara pagada por su familia, para que pueda presentar sus obras.
Por las oportunidades de su padre y por la fuerte influencia de su abuelo, tuvo una formación muy especial. Mendelssohn nunca pasó por una escuela pública, todos sus estudios fueron con instructores particulares. Al igual que su hermana Fanny, con la que era muy cercano. Tenían una rutina rigurosa en su educación: se sabe que a las 5 de la mañana se levantaban a leer filosofía. Claramente sobrepasa cualquier modelo de la época y desde temprana edad demostró que era un genio, un niño genio, que a los 15 años ya había compuesto 12 sinfonías para cuerdas.
- ¿Qué obras destacan dentro de este periodo?
- Si nos abocamos en sus obras maestras, tenemos que entre los 15 y los 17 años compone su Octeto Para Cuerdas Opus 20 y su famosa Obertura para El sueño de una noche de verano, creaciones que marcaron el nacimiento del genio.
- La Europa en la que vivió Mendelssohn estaba muy convulsionada social, política y creativamente hablando ¿Cómo se desenvolvió en ese ambiente tan intenso?
- Mendelssohn, si bien era un hombre sensible, por su origen se mantuvo alejado de las revoluciones. Incluso cualquier revolución perjudicaba a su tradición y familia, por lo que era algo reticente a eso. Sin embargo, estuvo muy atento a lo que sucedía culturalmente. Se dedicó a viajar, a imbuirse de otras culturas. Recorrió Europa y tomó lo mejor de cada cultura de ese tiempo y lo hizo suyo. Se desarrolló como un artista multifacético, que completó la música con la pintura con acuarela, testimonio vivo de sus viajes. Todo lo expresaba a través del arte, por ejemplo, La Gruta del Fingal como una carta a sus padres para expresarles lo vivido en su viaje a Inglaterra.
- Y en cuanto al romanticismo, ¿qué lugar ocupa en este movimiento?
- Mendelssohn es, quizás, el primer romántico hecho y derecho. El primero que se encausó completamente en este torrente creativo. Ya Beethoven y Schubert se habían adentrado en el Romanticismo y le dieron esta forma a sus creaciones. Pero Mendelssohn va más allá de la forma, y vuelca sentimiento, profundidad a la obra, vuelca drama. Incluso, yo diría que es el más elegante de los románticos. No es ese romántico que se rompe las venas. Mendelssohn, si va a llorar una lágrima, esa lágrima es de oro.
Justicia para la figura y obra de Mendelssohn
Cómo ferviente admirador de Mendelssohn, Elías Allendes destaca lo refinado y virtuoso de las composiciones del genio alemán, y acusa que a pesar de la popularidad de su nombre y de que no se ponga en duda la calidad de su obra, es un autor poco tocado. "Mendelsohn en sí es muy popular y reconocido, al punto de que todos los años alguna orquesta tiene en su programa La Sinfonía Italiana y cada fin de semana en Santiago se toca la Marcha Nupcial, compuesta para El sueño de una noche de verano. Pero curiosamente se tocan poco otras obras de él", declara. Es por ello que para esta oportunidad han preparado una selección de Lieder y el Trío en re menor para piano, violín y violonchelo, Opus 49.
- ¿Cómo se encuentra la obra de Mendelssohn a 200 años de su nacimiento?
- En estos momentos no se lo toca mucho, no por falta de calidad ni de popularidad. Su lugar en la historia de la música es incuestionable. Sino que por la dificultad de su ejecución. Mendelssohn en sí es popular y reconocido, al punto de que todos los años alguna orquesta tiene en su programa La Sinfonía Italiana y cada fin de semana en Santiago se toca la Marcha Nupcial, compuesta para El sueño de una noche de verano. Pero curiosamente se tocan poco otras obras de él.
Era un virtuoso en el piano, y como personaje elevado en su espíritu musical, no soportaba que quienes lo acompañaran no estuvieran al nivel. Incluso se vanagloriaba de componer virtuosismos para sus acompañantes y colegas. Hacer un mendelssohn significa trabajar mucho, ser muy buen músico y dominarlo al punto de divertirse con las complejidades de sus creaciones
- A partir de este homenaje por su Bicentenario, ¿cómo se puede hacer justicia con Mendelssohn?
- En la medida de que se toquen obras menos conocidas de su repertorio, se le haría justicia, más allá de lo que se haga este año. Mendelssohn es un autor tan exquisito en el sentido literal de la palabra, tiene tantos detalles, delicadeza, potencia y profundidad su obra, es una pena que no se lo toque más y se repitan siempre las mismas obras, al punto de la chabacanización de su Marcha Nupcial; ya a nadie le parece elegante, está completamente descontextualizada y desvirtuada.