Desde que Felipe Marín tomó la viola por recomendación de su anterior profesor de violín, Jaime de la Jara, sólo ha cosechado éxitos. Tanto es así, que la reciente aparición de un DVD en Alemania que registra su participación como parte de la Orquesta Juvenil de las Américas, en una función del Réquiem de Verdi dirigida en Munich por Plácido Domingo, le llegó casi de sorpresa. "Fue todo tan rápido que casi ni me acordaba del DVD, hasta que me lo mandaron", cuenta.
Plácido Domingo dirigió por cinco días esta orquesta, integrada por una selección de 110 músicos jóvenes del continente, de la que Marín (junto a otros dos chilenos) formaba parte desde el 2005. Esto, en medio de una gira más extensa, que hizo que el joven violista casi olvidara esas funciones que quedaron registradas y ahora fueron editadas. "Lo grabamos y después no tuvimos más contacto con él. Pero fue increíble, un muy buen montaje, excelentes sonidistas, y el DVD está súper bien hecho, imagínate, tecnología alemana, suena increíble".
A raíz de su destacada participación en esta orquesta, lo invitaron a tocar a Brasil junto al reconocido director de la Orquesta Sinfónica de Montreal, Kent Nagano, y luego a una ópera de cámara como la única viola (y además el único latinoamericano) junto al director de la Orquesta Filarmónica de Nueva York, Lorin Maazel.
El norteamericano escogió 9 músicos entre 180 postulantes del más alto nivel. "Estaba muy nervioso porque era súper comprometedor, tenía que hacerlo bien", dice sobre esta invitación de la que finalmente salió airoso y feliz. "Maazel también estaba muy contento", afirma, al tiempo que abriga la ilusión de integrar alguna vez la prestigiosa orquesta neoyorquina que dirige el maestro estadounidense. Me he dado cuenta que los sueños, cuando uno trabaja, se pueden hacer, asegura.
"Aparte de voz, tiene patas"
Javier Arrey estudia canto junto al profesor Hans Stein. Ha participado en otros concursos importantes a nivel internacional, pero este año logró dos cosas envidiables: ser el primer chileno escogido para participar en el concurso "Operalia" para jóvenes cantantes, a realizarse entre el 24 y el 30 de junio en París, y además haber sido escogido sin postulación alguna, sino que por el propio Plácido Domingo, durante la visita del tenor español a Santiago en marzo pasado.
Como miembro del Coro del Teatro Municipal, Arrey tuvo acceso a los ensayos del español para su presentación en Plaza de Armas, y aprovechó la oportunidad para acercarse y hablar con él. "Como aparte de tener buena voz tiene bastantes patas, se acercó y le dijo si podía escuchar una grabación que había hecho", cuenta su profesor, Hans Stein.
Arrey andaba con otros tres cantantes amigos, que también querían ser escuchados, pero no tenían grabación, por lo que Domingo optó por hacerles una audición a los cuatro. Entre ellos también se encontraba otro alumno de Stein, Luis Olivares, que impresionó al español pero que por edad no podía calificar para el concurso. "Le dijo que lamentablemente no podía participar, pero que si hubiera ido al concurso el año pasado seguramente lo hubiera ganado", cuenta el profesor.
Entonces solo Arrey fue escogido para participar en el concurso, lo que comprobaron al día siguiente del encuentro con el tenor. "Como estas cosas de repente se hablan pero no se concretan, mandó un mail preguntando qué tenía que hacer para participar. Le respondieron: 'El maestro Domingo dijo que él te escogió, así que no tienes que mandar nada'", relata Stein.
Así, el joven cantante oriundo de Valdivia acaba de embarcarse a Francia, donde Stein espera que "ojalá gane los 30 mil dólares" en el concurso que creara el propio Plácido Domingo en 1993: "Está difícil porque son muy competitivos, pero es importante porque allá lo escucha mucha gente. El año pasado y antepasado estuvo en concursos parecidos, que creo que ayudan a la formación. Javier tiene una voz importante, siempre pensé que estaba llamado a hacer carrera fuera de Chile. Además tiene 25 años y puede dar mucho más aún".