En la ceremonia del Aniversario 181 de la Universidad de Chile, realizada el pasado 17 de noviembre, la rectora de la institución, Rosa Devés, pronunció un discurso en donde se refirió a la importancia de extender una mirada y práctica transdisciplinar en el área de la docencia, destacando a una de las profesoras que fue reconocida como Mejor Docente 2023 Carolina Espinoza, Dra. en Física, música y académica del Departamento de Sonido de la Facultad de Artes, quien ha combinado su vocación científica y su pasión artística en una carrera profesional.
Las palabras de la máxima autoridad fueron: “Si bien a veces nos parece que avanzamos lento en la integración de distintas disciplinas, hay hechos muy esperanzadores. Por ejemplo, el que la Facultad de Artes haya distinguido como Mejor Docente 2023 a la Dra. en Física Carolina Espinoza Oñate, académica del Departamento de Sonido en dicha Facultad, quien obtuvo su doctorado en la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas e investiga en proyectos interdisciplinares donde convergen las artes visuales, la física, la sonología, la electrónica y la programación. Académicas como la Dra. Espinoza están cambiando la forma en que educamos y generamos conocimiento”.
Carolina ha entrelazado los caminos de la física, el sonido y la música dentro de la docencia y la investigación, abordando principalmente su quehacer desde la comprensión de vibraciones y ondas mecánicas en distintos rangos del espectro de frecuencia, desde su generación, propagación, percepción y utilización práctica.
“Al entrar al Departamento de Sonido me propuse desarrollar un tema de investigación en que pudieran dialogar mis inquietudes científicas y artísticas. Fue en esa búsqueda que comencé a prestarle mayor atención a los instrumentos musicales, sus propiedades sonoras y cómo éstas dependían de sus materiales y geometrías, tecnologías e historia (...) me di cuenta de que los instrumentos musicales eran objetos con tantas dimensiones, tan complejos y bellos, que me parecieron fascinantes y decidí dedicarme a estudiarlos”, manifiesta la académica.
De esta forma, ha realizado investigaciones en el Departamento de Sonido, financiados por Fondecyt y Fondart, enfocadas en el estudio de la relación entre materialidad y timbre de instrumentos tradicionales como la guitarra y el cajón peruano, y orientadas a la propuesta de nuevos materiales, además de publicar sobre el tema en distintas revistas indexadas.
“Esos proyectos, sumados al apoyo departamental, me han ayudado a montar un pequeño laboratorio en el que han colaborado estudiantes de diferentes unidades de la Universidad de Chile, y que nos ha permitido generar montajes experimentales para actividades de creación, investigación y docentes”, cuenta Espinoza.
Asimismo, en el área de la creación artística, la científica se ha desenvuelto como compositora y productora, y actualmente trabaja en el estudio de nuevos materiales para la fabricación de instrumentos musicales, y en la investigación de la colección de instrumentos patrimoniales del Museo de Arte Popular Americano (MAPA). Al respecto, indagamos en su historia con el mundo artístico:
- ¿De dónde nace tu interés por la música y el sonido?
“Comienza con mi familia. Mis padres y hermanos siempre disfrutaron de la música popular, del canto, de la práctica de instrumentos aprendida de manera autodidacta. Aunque nuestros recursos eran escasos, desde que mostré interés y habilidad en la música siempre se hicieron esfuerzos para que pudiera tener un instrumento a mi alcance. En ese sentido tuve, y sigo teniendo, un apoyo incondicional que hasta el día de hoy agradezco”.
Afirma que la música le permitió mejorar sus habilidades sociales, integrarse de mejor manera a su entorno y encontrar nuevas formas de expresión. “Es curioso que al salir del colegio el año 2004 quise entrar a Licenciatura en Artes mención Sonido, en la Facultad de Artes de la Universidad de Chile. Por diversas razones me terminé decidiendo por la Licenciatura en Física, también en la UChile. Desde ahí seguí una doble vida, estudiando física y componiendo canciones, tocando en diferentes bandas, editando discos. Catorce años después cerré el ciclo, entrando como académica al Departamento de Sonido”, revela.
- ¿Cómo se sintió ser reconocida como Mejor Docente 2023 de la Facultad de Artes, y además ser destacada por la rectora en su discurso?
“Entrar a la Facultad de Artes como académica fue un desafío y por supuesto que desde el primer momento quise enfrentarlo lo mejor posible. Sin embargo es bien sabido, particularmente en la academia, que entre los esfuerzos y los resultados no siempre hay correspondencia. Ese riesgo siempre existe, sobre todo cuando se va perdiendo conexión con las nuevas generaciones, con sus formas de aprender, o cuando nos vemos enfrentadas a situaciones excepcionales como fueron los años de docencia en pandemia.
Dado lo anterior, he trabajado en generar recursos más conectados con las formas de construcción de conocimiento actuales y me he propuesto que mi formación interdisciplinar permee mi quehacer docente. Recibir ambos reconocimientos, el de Mejor Docente 2023 y la mención de la Rectora en su discurso, me ayudan a reafirmar este compromiso con la docencia ante la certeza de que los esfuerzos hechos han dado resultados visibles para estudiantes y pares”.
- ¿Cuáles son tus proyecciones en el mundo del arte y específicamente en la Facultad de Artes de la Universidad de Chile?
“Quiero profundizar mis estudios en instrumentos musicales y para eso tengo pensado comenzar el próximo año a estudiar luthería con un reconocido Maestro Luthier de la Región Metropolitana, Roberto Hernández. El objetivo será aprender sobre la construcción de cordófonos latinoamericanos e implementar en la práctica el estudio y uso de materiales alternativos. Siguiendo esa línea, hoy trabajo con el Luthier e Inventor Claudio Carreño con quien tenemos el proyecto "Luthería Postdigital". Este proyecto está enfocado en la integración de técnicas digitales de diseño, simulación y fabricación en procesos de fabricación de instrumentos tradicionales”.
Por último, Carolina comenta sobre un desafío que está comenzando en el Museo de Arte Popular Americano (MAPA) de la Facultad de Artes de la Universidad de Chile: “Nos tiene sumamente felices. En conjunto con otras y otros profesores del Departamento de Sonido y de la Facultad de Artes investigaremos su colección de instrumentos patrimoniales. El foco estará en el estudio de los diseños, materialidades, técnicas y sonidos de los instrumentos, y en la proposición de nuevas dimensiones de preservación e interacción con éstos”.