Como una forma de sumarse a la lucha social que inició en Chile el pasado 18 de octubre por las desigualdades e injusticias estructurales que se arrastran hace décadas, diversos artistas se unieron en una convocatoria abierta denominada Réquiem por Chile, una de las primeras iniciativas multitudinarias en las que músicos y cantantes de diversas orquestas y coros se unieron en honor a las víctimas de la violencia estatal en el contexto de la actual movilización nacional.
La presentación que incluye el emblemático Réquiem de Wolfgang Amadeus Mozart y otras canciones chilenas, se ha realizado en tres instancias: la primera en la Plaza Bernardo Leighton, la segunda en el Museo de la Memoria y los Derechos Humanos, y la más reciente se desarrolló este domingo 10 de noviembre en el frontis de la Municipalidad de Recoleta, congregando a cientos de músicos y miles de expectantes entre las tres jornadas. La próxima cita ha sido confirmada en la Plaza Central de la Villa Olímpica, en la comuna de Ñuñoa, este domingo 17 de noviembre a las 11 horas.
“Esta iniciativa surgió de una preocupación legítima que tenemos como personas, en particular de los músicos que quisimos manifestarnos de una manera no violenta, pero frente a hechos de violencia”, explica Carolina Muñoz Coloma, soprano egresada de la Facultad de Artes y una de las gestoras del Réquiem por Chile.
Para Muñoz, han querido manifestarse desde la música frente a todas las desigualdades que ven en distintas escalas sociales y también desde su posición en donde la cultura y el arte se encuentran muy precarizados. “Nosotros combatimos desde la música, ese es nuestro lenguaje, y en ese sentido hay que hacer hincapié que no están abanderados con ningún partido ni sector político, creemos que tenemos que darle cabida a todo aquel que se quiera manifestar”, señala la cantante.
Réquiem para Chile
Según relata Carolina Muñoz, la idea del Réquiem para Chile partió desde un grupo de WhatsApp en el que inicialmente se contabilizaron cerca de 250 instrumentistas y 200 cantantes, pero que en los eventos superó ampliamente estas cifras. Entre los primeros integrantes se considera la orquesta base que pertenece a la Universidad de Chile “Camerata de Derecho”, la cual es dirigida por Igor Osses, otro de los gestores de la iniciativa.
La decisión de interpretar el Réquiem de Mozart radicó en que es una obra que la mayoría conoce y que ha tocado o cantado, pero también tiene que ver con su contenido, de acuerdo a lo que comenta el compositor Andrés Maupoint, también director de Creación Artística de la Facultad de Artes, quien justamente ha participado en la dirección rotativa de la obra en uno de los recientes eventos públicos, junto a otros músicos vinculados a la Facultad como Karin Friedly, Pablo Carrasco, Miguel Ángel Castro, Lorena Vergara, Sebastián Jorquera, entre otros.
“Uno se preguntaría por qué tocar el Réquiem en Chile si es una obra europea, pero el Réquiem no es solo una obra de un compositor austriaco, sino que es patrimonio de la humanidad. Es una manifestación de dolor, de algo fúnebre, de tristeza, pero también representa la esperanza de salir de esta crisis”, interpreta Maupoint sobre los mensajes que transmite esta misa de difuntos.
En esa línea, se asume como un rol necesario de parte de las y los artistas llevar esta instancia a la gente y principalmente a quienes no tienen acceso a escuchar una obra de estas características, a quienes tienen problemas de movilidad como ancianos, personas con discapacidad, no videntes, por mencionar algunas realidades.
“Si volvemos al punto de origen, el problema de raíz, que se vincula a las demandas que se vienen escuchando hace años, es la educación y, por ende, el acceso a la cultura”, puntualiza Andrés Maupoint.
Ideas como el Réquiem por Chile se han replicado ampliamente en los últimos días en diversos espacios y por diferentes agrupaciones de músicos, en apoyo al llamado “estallido social” y repudio a la acción estatal que ha vulnerado los derechos humanos de las personas en el contexto de la movilización, dejando muertos y miles de heridos a lo largo del país.
A propósito de lo anterior, un grupo de estudiantes y académicos de la Facultad de Artes realizaron un concierto abierto a quien quisiera participar el pasado jueves 7 de noviembre en las afueras de la sede Alfonso Letelier Llona, donde interpretaron el Réquiem de Mozart, Canción Final de Advis, El Derecho de Vivir en Paz de Víctor Jara y El Pueblo Unido Jamás Será Vencido de Ortega, bajo el lema “Que el arte y la música sean armas poderosas para combatir la injusticia…”.
.jpg.jpg)
