Con el objetivo de propiciar el acercamiento y la reflexión de la comunidad dancística en torno al campo de la educación somática y su contribución en la formación de profesionales de la danza y la creación escénica, el próximo 25 de septiembre se dará inicio al Encuentro Educación Somática en la Danza en la ciudad de Xalapa, en México.
La actividad, organizado por la Facultad de Danza de la Universidad Veracruzana, a través del Cuerpo Académico-Danza Contemporánea y la Red Universitaria de Investigación en Danza (Ruidanza), tendrá entre sus expositores a Francisca Morand, académica y subdiretcora del Departamento de Danza que fue invitada a impartir clases magistrales, compartir su experiencia profesional a través de una charla y dictar, además, la conferencia magistral sobre el tema de Educación Somática y Danza, en la sesión inaugural del Encuentro.
“La somática es un campo disciplinar que reúne varios sistemas de movimiento enfocados a la conciencia corporal y que, en el fondo, parte de la premisa de que cuerpo y mente son la misma cosa. Por lo tanto, el movimiento es una manera de conocerse y poder cambiar hábitos que no son muy eficientes para el sistema físico-psíquico”, explica la prof. Morand, quien se especializó en un sistema de análisis de movimiento llamado Laban/Bartenieff en Estados Unidos, sistema “que también ha acompañado a la danza durante muchas décadas”, dice.
De acuerdo a la académica, tanto el Laban/Bartenieff como otros sistemas de la educación somática se han vinculado históricamente con la danza, sobre todo en Estados Unidos. “Eso fue muy intenso en los ‘70, cuando está todo el desarrollo del posmodernismo norteamericano que finalmente va a cuestionar qué es movimiento, qué es danza. Si todo movimiento puede ser danza, entonces también estos sistemas de conciencia corporal y de maneras de investigar el movimiento desde parámetros que no son estéticos-artísticos, sino desde el movimiento en sí, aportan al desarrollo del lenguaje en la danza”, comenta.
Profesora, ¿qué temas va abordar en su conferencia de la sesión inaugural?
Tomaré como base el artículo que escribí en la revista A.dnz, un paneo general de cómo ha sido la relación entre sistemas somáticos y danza. Haré una revisión histórica, porque no es algo nuevo. La relación entre sistemas somáticos y danza comienza en Estados Unidos y Europa en los años `20. Entonces, ya hay una recorrido de casi un siglo de la relación especifica entre danza y somática, sin dejar de considerar que la somática también ya es un campo bien híbrido, con influencias de sistemas orientales como la yoga y Chi-Kung, de la gimnasia consciente y del psicoanálisis y la Gestalt. Y a partir de ese panorama, también abordar los desafíos que se presentan hoy en día, porque la danza también tiene en sí sus estándares, según la institución y estilo, por lo tanto hay que preguntarse cómo la somática puede ser un aporte en la formación proveyendo herramientas artísticas y no solamente corporales.
A la conferencia se suman talleres y una charla, ¿no?
En la charla abordaré cómo he utilizado lo somático en procesos creativos, para lo cual presentaré Emovere, que tiene mucho que ver con este planteamiento, porque trabaja en torno a la sensorialidad kinestésica en relación a la auditiva, y cómo este proceso, que es biológico, al cruzarse con la tecnología, produce un tipo de conciencia muy adecuada para la producción artística en este contexto, donde, para mí, las herramientas somáticas han sido vitales.
¿Y en los talleres?
En los talleres, que serán tres, uno por cada día, mostraré cómo mezclo lo somático con una clase de técnica, es decir, cómo hago una clase particularmente de somática pero pensando siempre que son bailarines en formación. En definitiva, estaré demostrando cómo sería una clase, pensando que los asistentes son profesores que estan dando clases en universidades, donde recibimos a estudiantes de entre 18 y 26 años, sobre todo pensando que las clases de somática son sistemas de movimientos que están pensados para adultos con alguna formación previa. De hecho, para estudiar un sistema somático uno tiene que tener mínimo 25 años, con experiencia e intereses ya probados en el área. Seleccionan a las personas que se lo van a tomar en serio porque son herramientas que no van a poder ser comprendidas por personas que se está iniciando en el movimiento.
Desde esa perspectiva, ¿qué le parece que se realice un encuentro en torno a educación somática en la danza, a la que han sido convocados estudiantes y profesores de danza, entre otros?
Es una iniciativa interesante pensando en Latinoamérica, porque habla de que se ha producido un interés en formar a los bailarines con otras herramientas. La somática plantea un empoderamiento corporal al hacerte consiente de tus hábitos, de la manera en que te mueves y al darte herramientas para que puedas ampliar ese rango. Es empoderar porque te da la posibilidad de elegir, de utilizar las herramientas que quieras, que no es lo mismo que entrenar y condicionar un cuerpo para que realice ciertos tipos de movimiento que son considerados los adecuados para ser bailarín o músico. Entonces, eso habla también de un nuevo paradigma que se está generando en la formación de bailarines en Latinoamérica, donde somos bastante conservadores en general. Por eso este encuentro entre danza, educación y somática es interesante, porque estamos hablando además de una hibridez, de tres cosas que se encuentran y al encontrarse se transforman en una cuarta que está por definirse.