En el marco de la curatoría "Afecto, o en su defecto" de la Galería Balmaceda Arte Joven, los artistas visuales Ignacia Saavedra, Valentina Escuti, Catalina Olivares y Patricio Kind -los dos últimos, egresados de la Licenciatura en Artes Plásticas de la Universidad de Chile- presentan la exposición "Signos finitos, efectos infinitos", muestra en la que enfocan el entendimiento de lo visual como el eje de interpretación de las obras y donde resaltan el vacío de ciertos eventos mediatizados, demasiado vistos y por lo tanto anulados.
"Hubo una excelente conexión entre los artistas seleccionados para esta muestra, lo que significó un entendimiento muy fluido entre nosotros. Ya en nuestro segundo encuentro nos dimos cuenta que el punto común entre los proyectos era el lenguaje, entendiéndolo como el mecanismo que genera un número infinito de oraciones desde elementos limitados, como los signos, los estímulos y las palabras", dice Catalina Olivares sobre las obras que se exponen en esta muestra que se podrá visitar hasta el próximo 29 de julio.
Así, Ignacia Saavedra y Valentina Escuti presentan en "Signos finitos, efectos infinitos" una secuencia de imágenes provenientes de la televisión que están enmarcadas en la frase "ME AFECTA", la que funciona como punto de tensión en esta propuesta artística en la que las imágenes exhibidas hablan del comportamiento humano en el ámbito colectivo y que permiten a estas jóvenes artistas reflexionar acerca de cómo cada ser humano tiende a la individual pese a que son totalmente dependientes de lo colectivo.
Patricio Kind, en tanto, artista formado en la Universidad de Chile y docente del Departamento de Artes Visuales, exhibe "260 gemidos en 63 minutos, papá", obra en la que trabaja con imágenes de la famosa tenista María Sharapova, las que son recortadas y repetidas en un ángulo que insiste sobre un encuadre erotizado. Dichas imágenes, que fueron extraídas de la prensa e internet y trabajadas desde el grabado, la pintura y el dibujo, son traídas al arte desde la masificación y vulgarización de la mirada voyerista.
"En mi obra hablo del defecto mediático, en este caso de la imagen de Sharapova. Son dibujos hechos a partir de imágenes sacadas de Google, fotografías donde esta tenista sale gritando y otras que son más voyeristas", explica Patricio Kind sobre esta obra que está conformada por decenas de dibujos que hoy ocupan parte de los muros de este espacio expositivo y que tiene como protagonista a esta tenista, quien cautivó su atención hace "4 ó 5 años, cuando apareció el ring tone de los gritos de Sharapova", cuenta.
El nombre de esta obra -cuyo autor define como una instalación y donde el montaje tiene tanta importancia como los mismos dibujos o bocetos que la conforman-, alude al titular de una nota de Las Últimas Noticias, la que fue publicada a fines del año pasado luego de que María Sharapova participara en una exhibición de tenis con Gisela Dulko en Chile. "Después del partido salió esta nota, donde no hablaban mucho del partido, sino de sus gemidos", explica este artista, resaltando así el efecto mediático del que habla en su obra.
Por último, Catalina Olivares, egresada en 2009 de la Licenciatura en Artes Plásticas y quien además está a cargo de la producción y curatoría de la muestra "Intemperancia" que organizan Acción Sudaca y Balmaceda Arte Joven, exhibe en esta muestra una larga placa en la que trascribe una frase en sistema Braille que alude al cuerpo y a su ausencia; una propuesta en la que esta artista busca reflexiona sobre la escasez de posibilidades para la real inserción o desplazamiento de un no vidente en esta sociedad.
"Me pareció acertado vincular la escritura no vidente con la producción de un proyecto artístico, donde lo literario se separa de la literalidad y se transforma en un signo generador que incorpora a un nuevo espectador. Así, me propuse armar una propuesta que desde la prolijidad, la limpieza y la síntesis, pudiese entregar un discurso escrito que en primera instancia se vuelve ajeno al espectador común de arte, pero que prontamente logra vincularse con él desde el tacto, la presencia y luminosidad propia del metal", dice.
Para esta artista, la obra que presenta logra generar un punto de tensión en la muestra total puesto que, como explica, "las otras dos obras trabajan con la saturación de la imagen, con el ruido visual, el estímulo auditivo y el exceso de información. En cambio, mi propuesta tiene un carácter silencioso que propone otro modo de 'hacer lenguaje', otro modo de acercarse al espectador, donde no es raro que la mayoría quiera acercarse a las placas de metal y sentir el relieve de la escritura entre sus manos".
La exposición "Signos finitos, efectos infinitos" se podrá visitar hasta el próximo 29 de julio en la Galería Balmaceda Arte Joven (Av. Presidente Balmaceda Nº 1215, Santiago, segundo piso), de lunes a viernes, de 15:30 a 20:00 horas. La entrada es liberada.
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