Más de un centenar de personas repletaron las graderías instaladas frente al escenario emplazado al interior de la estación de metro Quinta Normal, lugar donde se realizó una Rotativa de Danza a cargo de la bailarina y coreógrafa Karen Connolly.
Organizada en el marco de las celebraciones del Día Internacional de la Danza, esta actividad contó con la participación de diversas escuelas existentes en la capital, las que desde las 17:30 horas hasta las 20:30 hrs. desplegaron ante un público muy receptivo la inmensa variedad de lenguajes que forman parte de esta disciplina.
De ese modo, el ballet clásico, el folclor y la danza contemporánea desfilaron ante la atenta mirada de un numeroso y diverso público, que presenció esta rotativa durante sus tres horas de duración.
Contenta con la recepción del público y con el desempeño de cada uno de los grupos que se presentaron en la rotativa, Karen Connolly, organizadora de esta iniciativa, afirma: “Los grupos estuvieron espectaculares, me gustaron mucho todas las intervenciones y tuvimos una espectacular cantidad de público”. En relación a este tipo de actividades en que la danza se abre al público de manera gratuita y masiva, señala: “Me parece que esta es una manera de acercar la danza al público en general, porque vienen saliendo del metro, se encuentran con esto y se quedan. Una señora me pidió hacer un justificativo para el marido porque se había quedado toda la tarde a ver la danza en ver de haberse ido a la casa. Lo encontré genial”, comenta riendo.
La diversidad de la disciplina también estuvo presente en esta rotativa, que incluyó desde la escuela de ballet del Teatro Municipal de Santiago hasta las compañías universitarias e independientes que imparten la carrera de danza en la capital. En relación a ello, Connolly sostiene: “Todo lo que yo hago siempre lo hago con los diversos estilos, porque encuentro importante que la gente se de cuenta lo rica que es la gama de estilos que tenemos en la danza, y que no es solo lo clásico ni solo lo contemporáneo”.
En esta oportunidad, el Departamento de Danza de la Facultad de Artes presentó tres coreografías. Su intervención comenzó con la obra “Por mi culpa, por mi culpa…”, creación de la profesora Verónica Varas y música de Violeta Parra. En este sexteto participaron Jorge Rojas, Fuad Cuzmar, Álvaro Salinas, Luis Leiva, Marcelo Ahumada y Luis Farías. A continuación se presentó el solo “Como se llama”, con creación e interpretación de Pablo Zamorano, estudiante de segundo año de la Licenciatura en Artes con mención en Danza.
Por último, toda la energía de la danza afro se apoderó del escenario con “Ogum”, también creación de Verónica Varas. Esta pieza grupal es un despliegue de energía constante sobre el escenario, y es que la obra representa a Ogum, dios de la guerra, en plena batalla.
Marcelo Ahumada y Marcela Corvalán son estudiantes de segundo año superior. Ambos fueron intérpretes de esta pieza, que según ellos mismos explican, fue elaborada durante el curso de danza afro impartido por Verónica Varas. En “Ogum” nada es dejado al azar, e incluso el vestuario de los intérpretes está cargado de simbología. Tal como señala Marcela, “el color de la polera es calipso porque los colores de ese dios son estos”.
Con respecto a la danza en sí, la bailarina agrega: “Verónica nos enseña la cualidad del movimiento según el dios, y nos explica por qué tiene ese carácter. En el caso de Ogum, como es el dios de la guerra no podemos estarnos riendo porque se supone que estamos en una guerra”, explica.
En relación a la presentación en la Rotativa de Danza, Marcelo comenta: “Es primera vez que bailo yo acá y sentí que la gente es súper entusiasmada con la danza y eso es súper bonito. Yo creo que es súper importante que se sigan abriendo espacios para la danza siempre, como en esta ocasión, y que no solamente la semana de la danza sea masiva, sino que sería muy bonito que todos los días fueran el día de la danza. Cuesta conseguir espacios para la danza, pero de a poco se han ido abriendo espacios para acercar la danza a la gente. Nosotros bailamos todos los días y compartimos con este arte que para nosotros es súper cercano, pero para la gente en general de a poco se va a ir abriendo camino”.
Misma opinión tiene Marcela Corvalán, quien afirma: “Sería bueno que no sea una semana sino que podría ser un mes, y que hayan distintas instancias masivas de muestra de danza a nivel nacional. Eso sería muy bonito”, y agrega sobre las actividades organizadas en conmemoración del Día de la Danza que estuvieron “intensas, con hartas clases en todas partes, varias presentaciones, todo bien masivo. Creo que es emocionante también compartir con otras escuelas, ver el trabajo de los otros, saber que hacen los demás, no por competencia ni nada de eso, sino para compartir conocimientos”. Su compañero concluye: “Hay danza para todos los gustos, es bueno que el arte se comparta con mucha gente, con las escuelas, que todos los bailarines formen un solo baile”.