El estreno es el viernes 17 de abril:

La energía de "Comala" aterriza en el Teatro Nacional Chileno

La energía de "Comala" aterriza en el Teatro Nacional Chileno

Inspirada en la novela "Pedro Páramo" del mexicano Juan Rufo, "Comala" es definida por su director, Raúl Osorio, como "un primer acercamiento a la novela de Rulfo", y es que la transposición del texto literario al formato teatral es complejo en la medida en que el texto original se desarrolla a través de la yuxtaposición de tiempos, recuerdos, y delirios componiendo una narración fragmentada en la que concurren realidad y fantasmagoría.

Por otro lado, "Pedro Páramo" no es sólo el relato de la historia de Juan Preciado, un hombre que llega a Comala, pueblo muerto, abandonado, y lleno de fantasmas, buscando al padre que nunca conoció; sino que esta novela retrata también el perfil de Latinoamérica, evidenciando la vida política, social y cultural que ha constituido nuestra identidad.

Pero no siempre estuvo Juan Rulfo en sus cabezas al momento de pensar en montar una obra para el egreso, ya que se barajaron obras como la "Ópera de tres centavos" y "Rey Lear". Como relata Cristóbal Pizarro, "cuando estábamos viendo qué obra íbamos a hacer para el egreso, pensamos en Shakespeare y Brecht. Después creo que fue Raúl quien propuso que trabajáramos con "Pedro Páramo" de Rulfo. Ahí todos la leímos y nos atrevimos a hacerla por el potencial escénico que tiene la novela en sí".

Cristóbal agrega: "Una de las gracias de haber escogido esta obra es precisamente por el material que la novela tenía porque los textos son muy buenos, entonces había que utilizarlos no solamente como un recurso sino que armarlos también de una manera interesante de manera de aprovechar el material que la novela tiene, con textos muy poéticos y muy bien estructurados".

"Comala" es el resultado de seis meses de intenso trabajo colectivo en el cual la dimensión pedagógica se desarrolló al mismo tiempo que la creativa. Inmersos en el desafío de aplicar los conocimientos adquiridos durante toda la carrera sobre el arte de la actuación, los 17 actores que forman parte del elenco jugaron también un rol decisivo en la dramaturgia, y es que la metodología de trabajo propuesta por Osorio consistió justamente en que cada actor propusiera su propia escena. En ese sentido, se trató de un trabajo colectivo del cual los actores destacan que Raúl "nos dio bastante libertad, por lo que teníamos que ser súper responsables con lo que estábamos proponiendo poner en escena", señala Khaled Darwich, quien en la obra encarna a Fulgor.

Si bien el montaje respeta bastante el texto original, desplazando íntegramente algunos párrafos al formato teatral, la literalidad del traspaso se enriquece con el uso de diversas vocalizaciones y atractivas partituras físicas cuyo uso potencia mucho Raúl Osorio en el trabajo actoral. Con respecto a esto, Gabriel Cañas señala: "Es interesante también el hecho de que como la obra pertenece al realismo mágico, permite que se combinen bailes o un artes marciales con escenas mucho más realistas".

"Comala" se muda a la sala Antonio Varas

El reestreno de "Comala" trajo consigo un cambio de sala, lo que también implicó la realización de cambios de orden técnico para adaptar el montaje al nuevo espacio de representación. Uno de los cambios más significativos fue el pasar de una disposición diagonal en relación al público a una frontal, lo que Gabriel Cañas califica como "interesante por el hecho de tener que someter la estructura que habíamos hecho antes a un cambio tan radical de puesta en escena en el que se modifica todo".

Misma opinión comparte Raúl Osorio, director de la obra, para quien "es interesante como experiencia el cambio de escenario para los actores. Hay factores tanto de orden práctico como otros de orden artístico que influyen en el cambio de sala, que incluyen la experiencia de los actores en una sala como esta, con un escenario frontal y un público mucho mayor".

Además de eso, el reestreno también significa una oportunidad para aprehender más profundamente el texto de Rulfo. Para Daniela Castillo, quien en la obra interpreta a Susana, "lo que me parece más interesante en relación al reestreno es poder mirar el material enseñado de otra manera, porque ahora uno ya tiene una distancia respecto del trabajo que realizó y lo puede mirar desde otro lugar. Ahora lo que uno aprendió está mucho mejor incorporado y entendido, entonces es mucho más entretenido montar la obra de nuevo". Cristóbal Pizarro, quien interpreta al padre de Susana, agrega: "Ahora empiezas a fijarte en los detalles de las cosas que ya están dominadas, como por ejemplo de la planta de movimiento o el aspecto vocal, entonces son elementos que se pueden trabajar mucho mejor"

Emocionados con la posibilidad de que su obra pueda tener mucha mayor difusión atendiendo a la capacidad de la sala Antonio Varas, también están conscientes de que esta apertura puede significar en el futuro una difusión de la obra en diversos colegios de la capital, aprovechando el hecho de que actualmente "Pedro Páramo" es una novela de lectura obligatoria en la enseñanza media.

Como señala Osorio, "Pedro Páramo es una obra muy especial porque viene de la literatura, y es una novela que está en los programas de estudios de la enseñanza media. Por ello, creo que es una buena oportunidad para que tanto los profesores como los alumnos puedan ver la novela y las imágenes que son absolutamente literarias, materializadas en una obra de teatro. Por otro lado, puede ser también un buen gancho para que la gente lea la novela de Rulfo".

Atendiendo al trabajo de adaptación realizado, el director hace hincapié en la dificultad que implica entrar en los lugares más profundos de "Pedro Páramo", en cuanto "es un texto que está hecho para la literatura, para ser leído, entonces descifrar la obra y materializarla con márgenes sobre la escena, descubrir la esencia de lo que ahí sucede, y rescatar de la literatura el universo mágico de Rulfo, requeriría de un trabajo de investigación y experimentación mucho mayor. En todo caso, la experiencia que hemos hecho nosotros en el plazo que universitariamente se nos da para realizarla ya tiene una validez como un primer acercamiento a una puesta en escena donde está lo esencial, donde se trabajó con rigurosidad, con mucho profesionalismo, dando como resultado una obra muy bien lograda". 

En efecto, el montaje de "Comala" movilizó a una treintena de personas, entre las que cuentan actores, diseñadores y músicos. La gran exigencia actoral que requiere, sumado a la participación del grupo musical Merkén  y al trabajo físico desarrollado por los actores da como resultado una obra llena de energía y emocionalidad.

Para Raúl Osorio, "la obra tiene muchas cualidades: primero está el valor del texto de Rulfo, es un texto muy bello que cuenta una gran historia; pero también tiene el valor de la presencia de los actores haciendo un ejercicio actoral con muchas exigencias, con mucha necesidad vocal, física y con la presencia de mucha energía en el escenario, y ellos rescatan en la puesta en escena el tema de la cultura latinoamericana también. Hay muchos factores que juegan a favor de una novela que merecería ser trabajada con mucho, mucho tiempo".

Las nuevas funciones de "Comala" se realizarán desde el viernes 17 hasta el sábado 25 de abril a las 20:00 hrs. en la sala Antonio Varas del Teatro Nacional Chileno (Morandé 25).  La entrada es liberada, con adhesión voluntaria. Para reservas, llamar al teléfono 696 1200 o al 671 7850 a partir de las 15.00 hrs.

Últimas noticias