Decano Pablo Oyarzún dialoga en torno al proyecto Juan Gómez Millas

Fue en el auditorio del Campus Juan Gómez Millas, estrenado a inicios de este año, el lugar en donde el Decano de la Facultad de Artes y presidente de la Comisión CEHACS, Doctor Pablo Oyarzún, se reunió con la comunidad triestamental de la sede Las Encinas de dicha facultad, para informarles sobre el desarrollo de la propuesta de revitalización de las Humanidades, las Artes y las Ciencias Sociales.

La creación de dicha Comisión fue encomendada por el Rector de la Universidad de Chile, Víctor Pérez en julio de 2006 y cuyo resultado fue un documento final de doscientas cincuenta páginas y nueve secciones, titulado Humanidades, Artes y Ciencias Sociales en la Universidad de Chile: un proyecto para el país en la perspectiva del Bicentenario, el que fue entregado por los integrantes de la Comisión CEHACS a la rectoría de la Casa de Bello en diciembre pasado y tras seis meses de trabajo.

"Este informe está vinculado con la expresión de una voluntad institucional, a partir de la rectoría, de emprender un proceso de recuperación y desarrollo de las disciplinas concentradas en el Campus Juan Gómez Millas y en las otras dos sedes de la Facultad de Artes (Alfonso Letelier Llona y Pedro de la Barra)", señaló en dicho encuentro el Decano Oyarzún, quien además explicó el trabajo de la Comisión, que contempló tres etapas: levantar un mapa de las actividades de las distintas disciplinas, a cargo del comité coordinador; se elaboró un diagnóstico y luego se realizó una propuesta de proyecto de desarrollo de las áreas. Resultado de lo anterior fue el informe final de la Comisión.

Dentro de los lineamientos claves expuestos en dicho informe, están: asegurar la calidad del cuerpo académico, lo que implica procesos de renovación y de exigencia de requisitos; una gestión integrada del Campus Juan Gómez Millas para el desarrollo académico y de iniciativas, cuyo impacto abarque a la comunidad externa, asociado a posibilidades de vinculación y cooperación con universidades del Consejo de Rectores para establecer redes y así potenciar masas críticas académicas en las distintas áreas de interés de desarrollo disciplinario. Y por último, está el proyecto de infraestructura, lo que significaría un cambio radical de la fisonomía del Campus JGM y que se vería reflejado en el traslado completo de la Facultad de Artes al interior de dicho Campus y eventualmente el traslado de la Facultad de Filosofía y Humanidades, ya que el actual edificio serviría como la biblioteca del Campus.

A fines de agosto de 2006, el Rector Pérez se reunió con la Presidenta Bachelet y con la Ministra de Educación, respecto del interés que la Universidad de Chile tenía de plantear este proyecto de desarrollo como un proyecto que implicara un aporte especial del Estado. La Presidenta se manifestó favorable al respecto y planteó que no debía ser una propuesta exclusivamente concentrada a la Universidad de Chile, sino que debía tener un impacto significativo en el resto de las universidades del sistema estatal. Bajo esas condiciones se le pidió a la rectoría de la Universidad de Chile que elaborara un proyecto al respecto. Ese proyecto fue coordinado por la Vicerrectoría de Asuntos Económicos y de Gestión Institucional y resultó en un documento entregado al Ministerio de Educación a fines de enero de 2007, a partir de una mesa de conversaciones en la cual participaron representantes de dicho Ministerio, el Prorrector Jorge Las Heras, el Vicerrector Económico, Luis Ayala y el Vicerrector Académico, Iñigo Díaz y el Decano Pablo Oyarzún.

Este segundo informe recoge los resultados del informe final que había elaborado la Comisión CEHACS y también refunde esos resultados introduciendo otros elementos, que tienen que ver con la implementación de Campus y con los factores presupuestarios, temas que la Comisión no consideró nunca de su competencia, "ya que la propuesta de la Comisión es estrictamente de desarrollo académico y comunitario de las áreas y las condiciones de comunidad que ese desarrollo académico debe satisfacer", explica el Decano Oyarzún.

"Como todos sabemos, se produjo una cantidad de interferencias, ruidos e inquietudes por la existencia del segundo documento, el que fue elaborado por la Prorrectoría y Vicerrectoría de Asuntos Económicos y de Gestión Institucional, entregado al Ministerio de Educación, el que tuvo una leve modificación en una nueva versión entregada a mediados de marzo del presente año. Este documento causó una serie de inquietudes en la comunidad universitaria, porque un documento de esa naturaleza no parecía estar completamente adecuado a lo que el informe había planteado. Principalmente las preocupaciones de la comunidad tienen relación a la implementación de cámaras de seguridad, cosa que ninguna de las autoridades de este Campus estaría de acuerdo de instalar tan simplemente, y otros temas como el presupuesto, dentro del cual se comprendía la venta de patrimonio de la Universidad de Chile y que muy fundamentalmente tiene que ver con las propiedades de la Facultad de Artes en el centro", explicó en dicho encuentro triestamental el Doctor Oyarzún.

El Decano de la Facultad de Artes agrega:"la inversión que se le pide al Estado en ese documento es de alrededor, cincuenta millones de dólares, (veinte y siete mil millones de pesos), más una contraparte de treinta y tres mil millones de pesos, dentro de lo cual se contempla algo que para mi gusto no podría ser jamás una contraparte, que son los estacionamientos subterráneos, los que se proponen como licitación. Son aspectos que el documento tiene y que me parecen que obviamente requieren de modificaciones sustantivas".

"El informe de la Comisión, que está disponible para la comunidad a través de Internet desde marzo de este año, señala algunas prioridades, pero a nosotros nos parecía importante poder consolidar una propuesta respecto a las prioridades y llevar eso a la discusión comunitaria en el Campus Juan Gómez Millas y a las facultades que están involucradas en esta propuesta. Nuestra intención ha sido llevar a cabo esa discusión comunitaria y hemos encontrado dificultades, no se puede desconocer eso, motivadas en buena movida por las suspicacias y el conjunto de situaciones no claramente visibles que se han producido en este período. La petición que ha hecho el Rector es que podamos definir entre todos las prioridades de este proyecto y que hagamos todas las modificaciones que sean necesarias al documento que se entregó originalmente al Ministerio de Educación, y que reflejen un consenso de comunidad", señaló Oyarzún, quien recalca que "la Comisión es de estudio y no tiene funciones resolutivas, sino que propositivas y que entiende que su referente esencial es el informe elaborado por ellos y entregado al Rector Pérez en diciembre pasado y no otro documento y que su tarea es solicitar a las distintas unidades del Campus que se lleve a cabo un proceso de discusión".

Sobre la venta de dependencias de la Casa de Bello, el Decano Oyarzún señala: "El único que puede decidir sobre venta de patrimonio de la Universidad de Chile es el Senado Universitario. Ellos no pueden decidir venta de patrimonio sin consultar a las comunidades afectadas por esa venta. Si pensamos en música, teatro o danza, hay que preguntarles si se quieren o no venir al Campus Juan Gómez Millas y eso está contemplado en el documento que se le entregó al Ministerio. Lo que hicimos como propuesta en el informe es la idea de integración académica de la Facultad de Artes, cuya solución física, tal vez la mejor de todas, es que todos los departamentos académicos estén concentrados en un solo lugar. No es la única forma de hacer integración académica al interior de la facultad, pero sin duda facilita la integración académica".

El carácter público de la Universidad de Chile

"Es un tema fundamental que tenemos que discutir, ya que muchas veces se apela al carácter público de la Universidad de Chile pero nadie tiene muy claro qué es. Es una discusión que la universidad se debe a sí misma para asentar las bases para el nuevo trato del Estado con sus universidades. En el informe, decimos expresamente que el proyecto de desarrollo de estas áreas no puede sustentarse sobre el alza progresiva de aranceles de nuestras carreras y para nosotros es un tema fundamental porque tiene que ver con el carácter público de la universidad, tiene que ver con nuestra capacidad de seguir siendo una universidad que tiene diversidad social en su interior", explicó el Decano Pablo Oyarzún.

El máximo representante de la Facultad de Artes respondió preguntas de académicos, estudiantes y funcionarios, las que estaban dirigidas, principalmente, a aclarar suspicacias producidas por el informe entregado por la Prorrecotría y la Vicerrectoría de Asuntos Económicos y de Gestión en marzo pasado al Ministerio de Educación.

Las preguntas formuladas en el claustro triestamental tenían relación a la construcción de infraestructura para la Facultad de Artes en el Campus Juan Gómez Millas y del futuro del personal de colaboración, al que el Decano respondió afirmando que "nuestro interés es resguardar los derechos del personal de colaboración y de todas las personas".

El Decano Oyarzún insistió en que "estamos planteando, como Comisión, que se organicen procesos de participación convocados por las máximas autoridades de cada área al interior del Campus, por la importancia de generar debates en torno al proyecto" y concluyó afirmando que, "no estoy dispuesto que, al interior de la Facultad de Artes, se produzcan despidos masivos. Hay que cambiar muchas cosas de la facultad, por lo que prefiero mil veces cosas donde nos tomemos más tiempo, haciendo de apoco las cosas, con respeto y velando por el resguardo de las personas y en común, con los consensos adecuados y eso es un compromiso central para mi".