Tras la presentación del libro "Imágenes sin comunidad. Lecturas de Debord":

Rodrigo Zúñiga:"Me interesaba rescatar a Debord de su datación histórica"

R. Zúñiga: "Me interesaba rescatar a Debord de su datación histórica"

El año 2007 se cumplieron cuarenta años de la edición del libro "La sociedad del espectáculo" del filósofo y pensandor francés Guy Debord, por ello el subdirector del Departamento de Teoría de las Artes, profesor Rodrigo Zúñiga, organizó un seminario para discutir sobre el autor y su obra. De esa actividad surgió el material del  texto "Imágenes sin comunidad. Lecturas de Debord", presentado el pasado miércoles 29 de septiembre en la sala Adolfo Couve de la sede Las Encinas de la Facultad de Artes.

En esta entrevista el profesor Zúñiga, editor del texto, cuenta detalles de la publicación y motivaciones de quienes participaron en él.

¿Cuándo y cómo surge el texto "Imágenes sin comunidad. Lecturas de Debord"?

La idea siempre estuvo presente en el seminario en torno a la figura de Guy Debord que realicé el año 2007. Mi intención era abordar la obra teórica y cinematográfica de Debord a partir de ciertos conceptos nucleares; pero quería que eso se fuera propiciando al interior de mis intervenciones en el seminario y de las discusiones que seguían. Como había (y sigue habiendo) muy poca bibliografía en español que trabajara el texto de Debord desde premisas filosóficas y estéticas "actualizadas", quise abrir un espacio para esa tarea. Guardo un gran recuerdo del seminario, porque fue muy intenso, lleno de energía y mucho feedback. Había ganas de trabajar "en serio" la obra de este autor, más allá de los tópicos y los lugares comunes. Quizá se trataba de un ánimo largamente acumulado, de un ansia por entrar al texto, por interrogarlo, por responderle, reprocharle, violentarlo... así que dentro del grupo de personas que formaron parte de este seminario, estas intervenciones son las que más se animaron a re-trabajar las primeras entregas. Terminé de armar el escrito en marzo, cuando estaba en París.

El libro suge cuando se cumplieron 40 años de la edición del texto "La sociedad del espectáculo", ¿Por qué es interesante y relevante volver en ese momento a la figura de Debord?
Porque, más allá de lo que uno pudiera pensar, en rigor Debord sigue siendo un autor desconocido. Sus trabajos cinematográficos, ni qué decir; muy pocos los han visto y son aún menos los que han intentado pesquisar la radicalidad de su programa de obra de una manera orgánica. Lo que me interesaba era rescatar a Debord de su datación histórica, quiero decir, de su "escenografía parisina" de mediados de siglo. Al mismo tiempo, revisar con la mayor precisión posible su inscripción en las corrientes materialistas y neomarxistas. Todo ello ameritaba una entrada atrevida, inquieta, abierta, a la coraza que muchas veces representa su escritura y su actitud entre desencantada y completamente nihilista. Para mí, Debord sigue siendo un pensador estratégico extraordinariamente complejo.

¿Quiénes participan de esta publicación?

He tenido la fortuna de contar con un grupo de co-autores muy diverso: Claudio Celis, magíster en Teoría e Historia del Arte y académico de la Universidad Diego Portales; Karen Glavic, socióloga e investigadora de la Universidad Arcis; Francisco Cruz, profesor de Poética en el Instituto de Arte de la Universidad Católica de Valparaíso; y Guillermo Yáñez, Director del área de investigación del Centro de Estudios Visuales de Chile. Todos ellos participaron del grupo original que trabajó en el seminario. En verdad, todo el equipo que se juntó aquella vez fue un lujo.

¿Hubo algún críterio específico que debiesen tener los articulos que finalmente componen el texto, es decir había alguna indicación editorial previa?
Cada cual puso su interés y sus capacidades, y luego, cuando ya dispuse de todas las colaboraciones, y más allá de algunas sugerencias que la mayor parte de las veces se correspondían con nuestras propias discusiones al interior del seminario, me encargué solamente de darle cierto tenor "colectivo" a la entrega final. No fue en ningún caso una "coral", pero sí una pieza conjunta donde cada uno de los escritores cumple una función relativamente clara en el resultado. Y debo decir que ese resultado, como principal responsable, me dejó realmente contento.

En el prólogo del libro usted señala que la publicación es "un asedio a Debord". ¿qué significa esto?
Significa simplemente que este libro fue concebido como una especie de "merodeo", de "asalto estratégico" al núcleo de la obra de Debord, considerando diversas vías posibles. Un asedio, en este caso, quiere decir "un interrogatorio" interesado especialmente en lo que este autor pueda ofrecer para lectores y autores sudamericanos de comienzos del siglo XXI.

"Imágenes sin comunidad. Lecturas de Debord" se encuentra disponible  en el centro de ventas de la sede Las Encinas (Las Encinas 3370, Ñuñoa) y en la sede Alfonso Letelier Llona (Compañía 1264, Santiago Centro).

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