En 2009 el Museo de Arte Contemporáneo de nuestra Facultad se integraba a la naciente red iberoamericana Anilla Cultural Latinoamérica-Europa. Junto al Centro de Cultura Contemporánea de Barcelona, el Museo de Antioquia de Medellín, el Centro Cultural de España-Córdoba y el Centro Cultural de São Paulo, inauguraba una línea de trabajo cuyo foco son las nuevas tecnologías al servicio de la acción cultural contemporánea. Un modelo de trabajo en red que promueve el intercambio entre artistas, teóricos, gestores y audiencias.
Junto a la integración de nuevos nodos, como el Centro Multimedia de México, Infoart de Uruguay y la Universidad de Caldas en Colombia, se viene impulsando una programación conjunta que también ha supuesto poner a prueba y adaptar la institucionalidad a estas prácticas colaborativas, sobre todo cuando los objetivos son promover la reflexión, innovar en los formatos, estimular la experimentación interdisciplinar e impulsar proyectos de co-creación.
Para Anilla Cultural MAC esto ha implicado ir más allá de las fronteras del museo y proponer acciones con actores de diversas facultades de la U. de Chile, con entidades afiliadas a la Red Universitaria Nacional, con universidades extranjeras y con profesionales de museos, centros culturales o de iniciativas independientes en torno a los desafíos de la cultura digital.
Las acciones desarrolladas responden a nuevas interfaces para la construcción de conocimientos colectivos. En ello el llamado “tiempo real” es una variable que desafía las estrategias de creación y divulgación. Son muchos los creadores que exploran o definen su quehacer desde allí, así como es evidente que los géneros ven tensionadas sus fronteras al pensar las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TICs) como herramienta, soporte y materialidad, lenguaje y reflexión estética.
Nuestro siglo nos muestra a diario la marca que la cultura digital toma y deja de lo cotidiano. De ello ya no es posible abstraerse, tampoco de su impacto en los modos de concebir, crear, producir y divulgar bienes y servicios culturales. Un ejemplo es el Diálogos a través de la ventana impulsado por el MAC a nivel nacional con estudiantes, profesores y agentes culturales de ciudades alejadas de los centros metropolitanos de Chile, Uruguay, Argentina y Colombia. Varias de las muestras más destacadas han sido recorridas a distancia, abriendo nuevas reflexiones en torno a las nociones de “públicos” y/o “audiencias”, y sobre estrategias educativas y didácticas en red.
Podríamos decir que la cultura visual se ha transformado en un friso de pantallas interactivas presentes en la vida pública y privada, donde el espacio y tiempo son desafiados por la ubicuidad de la virtualidad y por una mutación acelerada de los géneros y formatos que definen la producción cultural.
Frente a este cambio de paradigma, Anilla Cultural se ha vuelto una plataforma donde la convergencia resulta de procesos horizontales, unas praxis sin centro ni jerarquías decimonónicas. Dicho de otro modo, metodologías orientadas a la puesta en común, el acceso abierto al conocimiento y a sus medios de producción y reproducción.
Alessandra Burotto Tarky
Coordinadora Anilla Cultural
Museo de Arte Contemporáneo